El contagio | Colección Sergio Larraín García-Moreno

Compartimos la segunda entrega de la serie documental La vida de las cosas: archivos y coleccionismo, en torno al fundador del Museo Chileno de Arte Precolombino y Premio Nacional de Arquitectura Sergio Larraín García-Moreno, para quien el coleccionismo era una forma de vida, una sensibilidad orientada a lo material y lo sagrado de los pueblos originarios de América

por Centro para las Humanidades UDP I 30 Junio 2025

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Arquitecto, diplomático, formador de generaciones y Premio Nacional de Arquitectura, Sergio Larraín García-Moreno dejó su huella en diversos ámbitos. Pero su legado más singular y perdurable es otro: la fundación del Museo Chileno de Arte Precolombino, nacido a partir de la donación de más de mil piezas de su colección privada. Una colección reunida no desde el cálculo, sino desde una pasión que él mismo llamaba “el contagio”.

Ese contagio era más que un impulso coleccionista: era una forma de vida, una sensibilidad orientada a lo material y lo sagrado de los pueblos originarios de América. Durante décadas, Larraín acumuló y convivió con objetos rituales, piezas ceremoniales y artefactos cotidianos que convertían su casa en un museo vivo, en una especie de templo doméstico donde los tótems acompañaban la rutina y la reflexión.

Lo distintivo de su mirada radicaba en una forma de belleza que no discriminaba entre lo artístico y lo arqueológico. Para él, el arte precolombino no era solo patrimonio a preservar, sino un sistema de sentido, una forma de conocimiento que conectaba estética, espiritualidad y técnica. Por eso su museo, único en su tiempo, traspasó las fronteras nacionales: reunió piezas desde Mesoamérica hasta el Cono Sur, proponiendo una visión panamericana que desafiaba la idea de una cultura encerrada en los límites del Estado-nación.

Larraín no fue un acumulador solitario. Compartió su entusiasmo, contagió a otros con su fervor por la cultura material, generó redes de colaboración entre coleccionistas, arqueólogos y artistas, y promovió una noción del museo como espacio de apertura, estudio y disfrute colectivo. Su colección —y el museo que la alberga— son hoy una plataforma pública de memoria, un lugar donde las piezas no se fosilizan, sino que siguen dialogando con quienes las observan y estudian.

El contagio de Sergio Larraín fue, en el fondo, una forma de transmisión cultural: afectiva, intelectual, estética. Su gesto inaugural fue convertir el gesto privado de coleccionar en un acto público de generosidad que amplió la mirada del país sobre su pasado profundo.

 

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La vida de las cosas: archivos y coleccionismo es una serie documental de seis capítulos que explora el universo de cineastas y fotógrafas de culto, poetas iconoclastas, y apasionados del arte precolombino y de la neovanguardia, a través del examen de sus archivos y colecciones, verdaderos núcleos de referencia dentro del panorama cultural del Chile contemporáneo.

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